SEÑORA CANDYKILLER

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Dulzura mezclada con oscuridad


Autorretrato © Señora Candykiller




La Señora Candykiller nos traza su realidad con ímpetu, desenmascara los colores, los arranca de la convención y nos los devuelve con su verdadera dimensión, al desnudo. Polifacética, desde su creatividad en el campo del diseño y las artes plásticas nos enseña cómo se puede mostrar la fuerza pura como belleza de la que Breton consideraba únicamente cierta en su ensayo Amour fou: “la beauté sera convulsive ou ne sera pas.” Y la señora que nos mata los falsos edulcorantes de la sociedad nos conmueve revolcándonos en el rojo del nervio creativo. Se define como hija de Lilith y denuncia que el paraíso que abandonó es puro cartón piedra.

El escritor Raül Ruiz la describió así:

“No se te ocurra trazar mi piel con líneas definitorias. Guarda para ti los barrotes de prejuicios y condenas morales. Hace tiempo que exploté mi burbuja, que arranqué la tapa del desagüe por el que circulan las mierdas de este mundo. Mírame desde la infinidad de la distancia, posiciónate a mis pies y descubre mi feminidad en tus pupilas. Podrás ver mi sexo, pero no permitiré que te sumerjas en mis ojos, en la puerta de mi alma. ¿Quién soy? Me preguntas. Yo te beso y te respondo. Muerdo tu labio inferior, tu labio superior, tu lengua. Acaríciame en la distancia pero no me hables de promesas con fecha de caducidad; no reacciono ante palabras ni besos. Mis orgasmos radican entre los colores de una imagen, en el interior de un zoom, sobre la montura de una nota musical. ¿Qué quién soy? Yo soy Lilith, la madre del mundo. No hacen falta preguntas para que te conceda respuestas, pero no se te ocurra besarme. Simplemente, teje un vestido de plata con el brillo de mis ojos y podré descubrirte entre la oscuridad.


¿Es en el fondo del mar donde está tu llave? Yo la buscaría dentro de tu sexo, entre el sudor de tus senos, en los restos de cerveza de tu boca. Y aun así me equivocaría. Te gusta escupir en la cara de Lucifer, convertirlo en tu ramera, sodomizarlo con tus pinceles. ¿Cuándo abandonaste el rebaño? Oveja de ennegrecido pelaje, escultura animal de la esencia de Lilith, te cuelgas desde lo alto evitando que te salpique la corrupción de semen y flujos de consumo rápido y valores de telemarketing. Los pastores se postran ante ti embriagados por el perfume de tu coño, pero tú descargaras sobre ellos tu sangre, pintando de rojo las cadenas de su raciocinio. ¡Concede color al mundo desde tu oscuridad! Destruye a los santos y veja a las vírgenes, ridiculizando el paraíso de una existencia inocua. Será entonces cuando yo busque el brillo en tu mirada, desafiando los destellos que serían capaces de cegar al mismísimo Apolo. Porque será tras alcanzar la ausencia de tonalidades cuando solo quedará la música. Y cabalgaré notas por ti, convirtiéndome en un yonki de tu voz, hasta que el baile de los muertos me alcance. Entonces dormiré en tu regazo una inmortalidad latente sin haber probado el sabor de tus flujos vaginales: La fuente de la vida.”



Autorretrato 2 © Señora Candykiller



Eres diseñadora, dibujante, pintora. ¿Cómo te definirías como artista?

Me considero una persona creativa, me gusta inventar cosas, crear espacios, personajes, es una parte muy importante para mí.

En tus obras el trazo es agresivo, ¿qué intenciones hay tras la agresividad de la Señora Candykiller?

Creo que porque mi personalidad es impulsiva, soy muy sensible y temperamental, básicamente creo que la ilustración me sirve para descargar emociones del día a día.

¿Creas más desde la experiencia personal o desde la ficción?

Me gusta mezclarlo todo, la verdad, no siempre son experiencias personales, son situaciones reales mezcladas con surrealismo, ficción.

Sueles combinar dibujo y texto en la misma obra. ¿Por qué?

Son garabatos como parte del esbozo que me ayudan a que el mensaje sea más fuerte.

Una de tus series es Goodbye Doll. En una de las obras se puede leer la frase “Cierra la puerta” con cierto aire violento.  ¿Has tenido que cerrar muchas puertas o te arrepientes de no haberlo hecho?

Creo que hay que cerrar puertas para abrir otras, lo de Killer básicamente es por eso, no me cuesta o prefiero matar situaciones que creo que no me ayudan a ser yo. Arrepentimiento es una palabra que no me gusta... es pasado…soy más de presente y quizás a veces de futuro.

Parece como si Goodbye Doll fuera fruto de un hecho traumático. ¿Nos arrancan de la infancia a la fuerza?

NO…Va por el tema de femme fatale, desde siempre me ha atraído el papel de la mujer en la sociedad, mi libro favorito es el de “las hijas de Lilith”.

Según la mitología, Lilith abandonó voluntariamente el paraíso antes de la existencia de Eva, incluso en los textos cabalísticos se da como explicación que no existía armonía sexual con Adán porque este siempre quería estar encima de ella cuando los dos había sido creados iguales. ¿Te has rebelado mucho en la vida?

Sí  que me rebelo, sí...jajaja además me arde la boca y soy incapaz de no hablar....Me siento muy hija de Lilith,  no soporto las desigualdades entre géneros , nadie debería estar por encima de otra persona y sinceramente cuando alguien lo intenta me parece una muestra de debilidad.

¿Coleccionas tristezas?

Durante un tiempo lo hice…jajajaja en una exposición se creó un personaje que estaba descartado de un cuento que iba a ilustrar junto a un escritor Raül Ruiz, este se dedicaba a coleccionar las tristezas de los demás para sentirse más feliz, en la expo lo representábamos con una estantería de metal repleta de botes de conserva con ilustraciones de las penas de los demás , en un bloc animábamos a los visitantes a escribir las suyas y al tiempo las reenviaba en forma de dibujo a su correo .En el cierre de una de las Expo las pinte sobre el cuerpo de la artista experimental Kai corvus (simulando la caja de pandora) bajo la música en directo de Devil porque creó una banda sonora para cada personaje.

Otra de tus series es Ángeles o demoninos. ¿Crees que existe esa dualidad?

Son mis pequeños ángeles caídos, almas perdidas. Dulzura mezclada con oscuridad...

En referencia a “El fin de Orfeo”, ¿no hay lugar para los sueños en este mundo?

Los sueños son esperanzas, y una parte de ilusión que hace que te aísles y seas feliz... para mí el mundo es una olla repleta de sueños individuales…

El rojo es fundamental en tu obra, ¿qué te aporta?

El rojo le aporta el último golpe. .la pasión, la emoción, la sangre para que esté vivo.

Fin, cementerio, goodbye, killer… ¿no hay lugar para el optimismo?

Jajajajaja eso parece, incluso me han llegado a preguntar si me pasa algo…. El optimismo existe pero la oscuridad también al igual que el dolor y el placer, mis dibujos suelen ser tan grises o agresivos porque necesito volcar mis sentimientos, llorar, o enfadarme con el papel y realmente cuando acabo me quedo como nueva con una gran sonrisa. Es una vía de escape.

¿Podrías explicarnos un sueño?

Es gracioso pero siempre soñaba con vivir en una fábrica, rodeada de pinturas pero ahora mismo el que la niña que estoy esperando tenga esa sensibilidad me llena de ilusiones y nuevos sueños …. Quizás el de la fábrica vuelva pero en compañía…

Selección de la serie Goodbye Doll aquí

Una entrevista de Juan Carlos Romero
Señora Candykiller 
Fotos cortesía de Señora Candykiller
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